Actividad a realizar para concienciar de ese problema
Ante el aumento del deterioro y la degradación de la tierra en el mundo, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el Decenio de las Naciones Unidas para los Desiertos y la Lucha contra la Desertificación, que estará vigente entre enero de 2010 y diciembre de 2020 con el fin de promover acciones que protejan las tierras secas. El Decenio representa una oportunidad para establecer cambios críticos que mejoren la capacidad de las tierras secas para contribuir al bienestar de la humanidad a largo plazo.
En este sentido, los mandatos de la resolución contemplan la consecución de los siguientes objetivos:
- 1. La organización de actividades para celebrar el Decenio con la finalidad de concienciar a la ciudadanía acerca de (a) las causas y (b) soluciones de la actual degradación del suelo y la desertificación en el contexto del Marco y plan estratégico decenal para mejorar la aplicación de la Convención 2008-2018 (La estrategia)
- 2. La movilización de apoyo financiero y técnico para la secretaría de la Convención que impulse iniciativas especiales para la celebración de la Década así como otros eventos conmemorativos y actividades alrededor del Mundo; y
- 3. El monitoreo y la emisión de informes sobre el progreso de la preparación del Informe del Secretario General a la Asamblea General en el 69a sesión sobre el estado de la implementación de la resolución.
Algunos estudios también señalan que hay muy pocas cordilleras lo bastante elevadas para que puedan haber escapado al contacto demoledor de la actividad humana y muchas se enfrentan hoy a graves crisis ecológicas. La mayoría de las personas pensamos que las tierras altas están a salvo. Parecen muy distantes de la vida cotidiana, aparentemente libres de la contaminación que ha afectado a las llanuras. Pero las apariencias son engañosas y muchos hablan ya de lapérdida de las tierras altas. Y esto constituye también un gravísimo problema ya que las montañas son la clave de la criosfera, las regiones nevadas de la Tierra que reflejan el calor y lo devuelven al espacio y este “efecto albedo” ayuda a regular el calentamiento global. Además la mayor parte de los bosques del mundo se encuentran en regiones montañosas. Y las montañas son también un elemento crucial del sistema hidrológico de la Tierra actuando como enormes depósitos o torres de agua de las que gradualmente sale ésta en dirección a los ríos. Pues bien, muchas de esas grandes cordilleras están en la actualidad gravemente amenazadas. Muchos de sus bosques mueren prematuramente por la contaminación y la desecación. El Himalaya y los Andes sufren una severa deforestación por la explotación forestal y la presión poblacional. Las tierras altas de Etiopía se han convertido en desierto. El cambio climático ejerce presiones adicionales por las consecuencias del deshielo, lo que provocará condiciones de avalanchas y desprendimiento de lodos y desechos.
Entre las causas atmosféricas las principales son:
- Alta Presión: A escala mundial, las zonas desérticas están asociadas con la existencia de zonas de alta presión a ambos lados del ecuador. Estas franjas de alta presión se deben al descenso del aire que ha ascendido desde el ecuador y ha disminuido a su vez hacia el Norte y el Sur. Durante su descenso, este aire se calienta, aumenta su capacidad para retener el agua, por lo tanto capta una humedad que más tarde liberará en forma de lluvia.
- Corrientes Oceánicas: La presencia de corrientes oceánicas frías cerca de ciertos literales continentales occidentales, y la expulsión del agua hacia tierra firme, sirve para incrementar la avidez de los desiertos costeros, tales como el Atacama (Chile y Perú) y el de Namib (África meridional). Estas lluvias suelen perderse al chocar con los sistemas montañosos. Las regiones del sotavento pueden ser relativamente áridas.
- Durante el último millón de años, más o menos, las principales regiones de extrema aridez se han extendido y contraído al compás de los cambios globales en la circulación atmosférica, cambios que están refutados con mayor espectacularidad en el legado de los glaciares y blancos de hielo en las regiones polares.
- Sobre pastoreo extensivo: a medida que la cantidad de cabezas de ganado supera la receptividad de los pastizales perennes, el terreno es conquistado por pastos anvales menos apetitosos y por arbustos. Finalmente las plantas van desapareciendo y la tierra queda expuesta a la acción devastadora del viento y agua.
- Agricultura continua en tierras cultivables: Las tierras cultivables que quedan desprovistas de una cubierta vegetal que las proteja quedan expuestas al poder erosivo del viento y la lluvia. La producción de la cosecha sufre a largo plazo debido a que esas capas superiores de tierra contienen la mayor parte de la materia orgánica y los nutrientes que las plantas necesitan para crecer. La erosión rompe la estructura del suelo y disminuye la capacidad de acumulación de aguan del mismo.
- Anegamiento y salinización de tierras irrigadas.